El año del cambio

Los últimos diez días han traído muchas e importantes noticias para el baloncesto español. La de más relumbrón e importancia, ha sido la del fichaje estrella de Pau Gasol por los Angeles Lakers. Tengo que decir que mi intuición me ha funcionado a medias solamente. Estaba seguro de que Pau abandonaría Los Grizzlies antes de que acabara Febrero, pero me ha sorprendido su aterrizaje en la ciudad de Nuestra Señora de Los Ángeles (ese era el nombre completo de la misma). No tenía ni la menor idea (casi nadie la tenía, aunque ahora, como siempre, algún periodista listillo se apunte la medalla) de que Los Lakers habían pujado por el jugador español. Sabía, como todos, que Bryant y Pau habían coincidido en Barcelona, pero de ahí a pensar en algo más que un saludo entre colegas, va un abismo.
En fin, lo importante es que ¡por fin! Gasol está en un equipo que aspira a ganar el famoso anillo de campeón. Pero no sólo eso, está en el equipo con más "glamour" de la historia del basket americano, el del "show time" de "MAGIC JOHNSON", "LEW ALCINDOR " (más conocido como Kareem Abdul-Jabbar) y "JAMES WORTHY", que antes lo fue de de Elgin Bailor, Jerry West, Chamberlain, etc. El de los grandes duelos contra el otro equipo mítico de la NBA: Los Boston Celtics de "PARISH" , "JOHNSON" (el otro), "McHALE" y "LARRY BIRD" sucesores de Bill Russell, Red Auerbach, etc. El que ha ganado las tres ligas profesionales que han existido en los USA: la NBL, la ABA (estando en Minneapolis) y la resultante de la fusión de estas dos, la actual NBA. Es decir, ahora está en el piramidón (la parte más alta) de la pirámide, justo donde le corresponde a un jugador "All Star".
Pero, además, coincide otra circunstancia: parece ser que Los Celtics de Boston por fin han encontrado un equipo ganador. ¿Será posible que durante unos años volvamos a vivir los duelos en la cumbre de estos dos equipos?. ¡Ojalá así sea!.
De momento, desde su incorporación Pau a intervenido en 3 partidos con dos victorias y una derrota. Ha conseguido unos números deslumbrantes y lo que parece más importante aun: a Kobe Bryant le gusta que esté a su lado y jugar con él. Le hemos visto moverse por la cancha con una cara más alegre, más distendido y relajado, en definitiva: más feliz.
Enhorabuena Pau. Que tus sueños (y los nuestros) de verte campeón, se cumplan.
Amén.